La tierra más fértil es el cerebro.






No quiero morir de viejo,
la muerte es mi compañía,
y no le tengo miedo.
Que venga cuando quiera.

No me importaría morir solo,
si es en una cama y sin sufrir.

No soy como mi madre.

Te deseo una buen más allá,
mi gran amigo de cuatro patas.

Tu alma era mucho mas grande,
que la de muchos y muchas,
que creen tener el cielo ganado.

Ama



Estuve con ella dos horas,
dos horas mirando como boqueamos ya muertos,
aferrándonos a la vida cuando ya no tiene sentido.
No pude soportarlo más.

Le solté la mano.
La deje morir sola.

Ella lo sabía hace tiempo.
Y aun así, esperaba siempre..., esas veces.

Murió cuando salí de allí.