Sueño 28 febrero

Las hojas de la maleza,
me estallan en la cara.
Corro…corro como un poseso,
tropiezo y tropiezo,
caigo, pero sigo corriendo.
Tengo el cuerpo lleno de rasponazos,
de heridas, algunas profundas,
no hay tiempo, sigo corriendo.
No puedo mirar a los lados,
ni levantar la cabeza,
ningún horizonte me guía,
pero sigo corriendo.

No se, si soy cazador o pieza,
tengo miedo, sigo corriendo.

Y de repente...nada.

Me despierto.

2 comentarios:

  1. Mis sueños, siempre acaban en nada, como los tuyos, pero tengo claro que soy pieza.

    ResponderEliminar
  2. durante una temporada, se me repetía el mismo sueño: un taxista loco, en Madrid, me seguía por toda la ciudad y yo no hacía más que esconderme en el asiento trasero del taxi donde huía...

    también creo que era pieza!

    ResponderEliminar

Dejate llevar por la generosidad en tus comentarios.
Ya que has llegado hasta aqui, desparrama tus palabras sin ningún complejo, ve más allá... de un "me gusta" o "un que bonito", utiliza la tinta de tus venas, regalame un millón de letras, o algún verso...cuentame una historia, envíame una carta dibujada...lo que quieras.
Pero sobre todo no te vayas, sin saludarme,
pensaría que soy un mal anfitrión.