Una caricia desde mucho más alla del olvido.

Diane Setterfield

"Por muy banal que sea el contenido siempre consigue conmoverme, porque alguien ya fallecido, en su momento, considero esas palabras tan valiosas para merecer ser plasmadas por escrito.
La gente desaparece cuando muere. La voz, la risa, el calor de su aliento, la carne, y finalmente los huesos... Todo recuerdo vivo termina, es algo terrible y natural al mismo tiempo.
Sin embargo, hay individuos que se salvan de esa aniquilación, pues siguen existiendo en los libros que escribieron. Podemos volver a descubrirlas. [...] A través de la palabra escrita pueden enojarte o alegrarte. [...] pese a estar muertos. Como moscas en ámbar [...] se conservan por el milagro de la tinta sobre el papel."

De Diane Setterfield El cuento número trece





Mucho Soliloquio, algún Diálogo y poco Coloquio, poca lectura y mucho tiempo perdido.

Recopilación de unos ocho meses, de poco en poco espacio, sin tiempo
 
Con mi sincero agradecimiento a:
 
Soliloquios
 
Que "Yo", puede estar libre del desorden?
 
Alta va la luna que se lleva muertos.
El cielo me hace cerrar sordos los ojos.
El pozo, eriza el reflejo de su recuerdo.
 
Se lo que soy,
y aun así quiero ser poeta,
desgranar versos,
desangrar conciencias.
Sé que se me pierden las letras,
en tu tiempo…
Sin ser.
 
Qué difícil es amarse a uno mismo.
En el tiempo de los egos,
de dioses peleándose entre sí,
de héroes buscando ser eternos...
Como siempre.
 
Me lleve el mar al tronar de sus olas,
me llame alguna silueta de la luna...
Volveré de buena mañana.
 
La libertad, nunca es de pensamiento.
 
El amor se manifiesta, con las caretas del teatro de la vida.
 
Murió feliz escuchándose, sentado en su butaca.
 
La ley de todas las causas, busca respuestas, las loas, las vagas declamaciones, vanas, no sirven a sus épicos poemas.
 
Son tantos los hilos que llevan el pulso de la rienda de un destino incierto, que mi eternidad intenta desenredarlos... ordenarlos...mañana
 
Cada vez más libres, cada vez más desordenados, cada vez que nos miramos, renovamos esperanzas, las perdemos y esperamos su reflejo. Mañana.
 
Son tantos los días, tan pocas las noches, que la luna se parte en pedazos de espuma de mareas, en siluetas cosidas a nuestros zapatos.
 
Coherente, es la palabra que buscaba para mi epitafio.
 
Cuando doblo mi cuaderno para guardarlo en su rincón, mi ultima página se pierde entre los olvidos de mis mejores recuerdos.
 
Nunca he sido capaz de cumplir con mi deber, vivo por obligación en las vidas de otros, sin que se den cuenta. #confesion libre de pecado.
 
Dejaré que el tiempo corrompa solo mi piel, así vengaré el corazón de mis hijos, las almas perdidas de mis padres.
 
Algún día conseguiremos que la sangre sea incolora, inodora e insípida, y nos desangraremos, insensibles ya al dolor de otras muertes.
 
Preguntas absurdas que agolpaban diferencias, inundaban mi cerebro de respuestas obvias, cegándolo, robándole la escucha de su silencio.
 
Otras respuestas, las no pedidas, se adueñaban de mis dedos de escribir, mis ojos leían aquí y allá sin sentido, perdidos en miradas planas.
 
Necesitaba un enemigo para salir de aquella cárcel de autocomplacencia, una idea que revolviese mi conciencia y la hallé mirándome al espejo
 
Con la mirada fija en el reflejo de mi horizonte, vi las pupilas de los ojos que más quiero, rodeados de otros muchos llenos de esperanzas.
 
Mi encarcelado cerebro escapó con la ayuda de mis seis sentidos de su cómodo bucle y empezó a pensar en el sentido de preguntas y respuestas
 
Olvidada la vanidad de todos los yos que se atrapaban entre las mejores respuestas a preguntas equivocadas. Decidí opinar por escrito Pensar
 
Pensar fue todo un descubrimiento, doloroso, lento, sacrificado, pero me enseño a elegir las preguntas de todas las miradas de mi espejo.
 
Cuando la obviedad de la línea de una vida rompió sus fronteras de prejuicios, aprendí que debo ser mi enemigo para cambiar de preguntas.
 
Soy mi enemigo desde que me busco en silencio preguntas sin respuesta Soy mi enemigo para cambiar lo que no quiero ser, para ser libre de mi
 
No quiero que mi epitafio sea tan obvio como la respuesta a una pregunta no pedida, prefiero una pregunta sin respuesta.
 
Esto que te escribo casi como una carta, puede ser una disculpa en caso de que compartas conmigo su sentido, si no, es solo un malentendido.
 
[Regalo, regalo letras] Voceaba intentando acercar clientes a la alejada tienda de su Maestro en la Gran Feria Universal de Poemas y Cartas.
 
El conocimiento reside en las personas, no se crea ni se destruye, la experiencia reflexiva es inútil sino encuentra canales de comunicación.
 
La experiencia compartida, asienta o descarta la base de conocimiento que sustenta, principios, prejuicios y vanidades.
 
El fenómeno de la creación, no nace del conocimiento, emana del re-conocimiento de la imperfección y de la búsqueda de lo des-conocido.
 
La participación en una idea colectiva, depende de la disposición del individuo a despojarse de su conocimiento reflexivo desinteresadamente
 
Cruzar letras, es pintar las ideas de otro/a, hacerlas tuyas.
 
Entre la voz épica de Neruda, la aleccionadora de Benedetti, la sosegada de Borges, la que suena nostálgica en tantos ilustres, esta la mía.
 
Cruzar letras... es recitar a dos, a cuatro o a un número infinito, de voces y de manos. El resto es reflexión baldía., miradas perdidas...
 
Las palabras: Economía, Bien y Común, en todas sus acepciones fonéticas, se procesan en los mismos, distintos lugares de nuestros cerebros.
 
Fruto de la evolución, identificamos conocimientos clave, asociados la actividad diaria de nuestro cerebro, a medida que los necesitamos.
 
Me niego a ser rehén de una eternidad desbocada en cuatro o cinco segundos, sin miradas cara a cara, que rija los destinos de mis hijos.
 
Opinar sobre lo desconocido puede parecer osado, pero dejar que opinen solo los sabios, es de necios
 
Dios es solo una palabra, trasmitida en todos los idiomas y culturas de la historia, creada para esquivar el olvido eterno.
 
Dialéctica, como el atún rojo, es una palabra en extinción, con poco tiempo, el queda atrapado en una sonrisa entre dientes artificiales.
 
Tenemos la obligación, de plantearnos nuevas preguntas sin respuesta, solo así aquellas irresolubles irán encajando poco a poco. Verso a v..
 
Que poco tiempo nos podemos dedicar para mirarnos a los ojos, para reconocernos. Esta vida atropellada, no nos deja saber quiénes somos.
 
Eran casi más de dos en un reflejo, multitud de pensamientos compartidos, magia en una idea común. El olvido de cada día, acallo su brillo.
 
Para que deje de manar sangre por nuestros ríos. Que estamos dispuestos a derramar, defendiendo nuestros arroyos?
 
Solo tengo un libro en las distintas estanterías de mi vida, almacenados de arriba abajo,, aprendo al recordarlos,... aromas,, vocabularios.
 
Vino a verle la muerte, envuelta en una caricia,
cabalgando en la promesa, de un recitar a medias.
Versos anónimos.
 
Vino el verdugo de los tiempos,
anunciando una eternidad sin poesía,
y las almas compraban versos,
para acallar sus conciencias.
 
La voz, esa combinación de sentidos, no necesita melodías ni altavoces, solo necesita tiempo para recitar, a unos oídos.
 
Hay tanto que cambiar en los espejos, que ya no sabemos dónde guardamos sus reflejos…
 
Eruditos: Dejad de lado reflexiones y grandes citas y recorred la distancia que os separa de vuestra ignorancia común. Olvidad la eternidad
 
Mis vidas:
Una en la que se que me faltara tiempo para aprender, otra en la que aprendo sobre la marcha y otra en la aparento saberlo todo.
 
Si solo existiese un yo en el universo, creo que sería capaz de entenderlo, aún así, buscaría la manera de iniciar un debate o una discusión
 
Para convertirnos en verso, debemos ser letras escritas a un cerebro liberado de su cuerpo, de su universo. Debemos ser todos iguales.
 
Cuando el poeta se enfrenta a su lado del espejo, deja jirones de su alma.
 
El futuro de la humanidad, será vegetariano, o no será. Mi problema es que todavía soy carnívoro. Mi consuelo, mi poco futuro.
 
No pretendo que me entiendas, como tú exijo poca lectura y mucho tiempo perdido.
 
A veces uno nunca sabe porque persigue preguntas, en vez de abrazar respuestas.
 
Diálogos

Borges, Jorge Luis ‏@BorgesJorgeL De esa correcta aplicación de la ley de causalidad, se sigue que el menor de los hechos, presupone el inconcebible universo...
De un solo verso,
de la minúscula parte que lo concibió,
de un pobre sonido...
Nació la causa que buscamos.
Para que sea ley.
 
Pauline Le Roy ‏@MGpoesia Y cuando de tu alma puedas botar láminas de oro, vendrán a ti insospechadas vivencias. https://soundcloud.com/pauline-le-roy/ventana-abierta-con-su-mano …
habla tu voz, siente el tacto del olor de ojos, a la luz de la mirada de una sonrisa, en el brillo del humo, de la llama de una vela
 
Borges, Jorge Luis ‏@BorgesJorgeL Conozco cosas que casi nadie conoce, pero ignoro las que todo el mundo conoce.
Soy tan ignorante como cualquiera.
 
Borges, Jorge Luis ‏@BorgesJorgeL No puedo lamentar la perdición de un amor o de una amistad sin meditar que sólo se pierde lo que realmente no se ha tenido
Deje de lamentar hace tanto, que ya no te espero.
 
Prosa Poetica ‏@prosetica Mi autor cumple cincuenta mañana, esta muy afectado, no sé como consolarle, para que me deje vivir, desde mañana hasta sus sesenta.
Tu yo sabemos, que nos guardará algún espacio, en el tiempo que le dejan sus soliloquios.
Tu y yo sabemos lo que somos, en este acto de esta obra de teatro.
 
Agustín Márquez ‏@amaguses Hoy frente a ti me sentí espejo
Mantén la mirada en ese reflejo, quizá venga de más allá de los mapas de tu mente. Quizá no se escape en una mirada.
 
Fred M. ‏@morganfredman Tenía siempre a mano una queja mayor, más grave. Una guardada para minimizar las de otros. Una que sólo exponía cuando alguien más lo hacía.
Era solo dolor prestado y aún así cobraba intereses.
 
Sonja ‏@lsilenciosa Me duele esa lluvia que cae sobre los seres como aguja
Aguja que parte la carne, que cose su sangre, clavada en la memoria de cualquier corazón, angustia que engarza ecos de perlas
 
Agustín Márquez ‏@amaguses Es normal que nos sintamos vacíos, somos un 90% de nada.
De hecho es muy saludable saber, que todavía nos queda espacio.
 
Agustín Márquez ‏@amaguses Hay personas con las que hablar es como escribir con tinta invisible
Los susurros, a veces, no encuentran el camino correcto en su recorrido por las orejas, para llegar al oído.
 
Sonja ‏@lsilenciosa "El poeta finge en tanto finge que el dolor de amor no le transforma el alma"
Quien regala su alma en versos, se busca en ambos lados del espejo.
 
Sonja ‏@lsilenciosa "El poeta ama igual a todos pero tiene el don de saberlo"
Desespera en la esperanza, de compartir ese amor.
 
Borges, Jorge Luis ‏@BorgesJorgeL ¿De qué Adán anterior al paraíso, de qué divinidad indescifrable somos los hombres un espejo roto? #Beppo #LaCifra
Yo, desordenado‏@yodesordenado @borgesjorgel
De ese al que la culpa le hace esquivar el reflejo de su propia mirada.
 
Coloquios
 
Borges, Jorge Luis ‏@BorgesJorgeL De esa correcta aplicación de la ley de causalidad se sigue que el menor de los hechos presupone el inconcebible universo...
Siris ‏@EstudiosSiris  @BorgesJorgeL En ese universo amado Borges, la honorífica Cristina culta y reflejo de ti, obtiene Siete dieces y un ocho. Seré libre en ti.
Libre en ti seré, cuando me recites tus versos en honor de tu público, siete veces y un ocho, como entonces.
 
Vives en mis sueños para seguir existiendo en mis mañanas.
Vives en mis sueños para seguir existiendo en mis mañanas."// Presa de tu mirada.
Me encadenas a seguir el vuelo de tus letras,

 

Si te mueres, que no sea delante de una panadería.


En una ocasión en una panadería del centro, a la que acudía cada vez que bajaba de recados a la capital, fui participe de una conversación entre la panadera, una chica joven que se desenvolvía muy bien con los clientes y un parroquiano tan bien vestido que parecía que llevaba uniforme.

Ella le contaba que unos días antes alguien había caído fulminado delante de su tienda, por lo visto era un ataque al corazón, que en seguida una mujer en avanzado estado de gestación, se abalanzo sobre él practicándole  técnicas de resucitación cardiológica, parecía ser médico, y que un grupo de personas jóvenes, chicas en su mayoría, se pusieron como un cordón alrededor de la escena para dejar hacer a quien sabía lo que hacía, y apartar curiosos.

El hombre bien arreglado, mientras recogía su pan, pregunto a la panadera si conocía a la víctima del suceso, mientras daba media vuelta hacia la puerta.

Siempre me ha gustado el pan de esta panadería, se nota que no está pre-congelado, lo he preferido a veces al pan del día de otros sitios.

Cuando me acercaba a pedir mis dos barras de pan en pico, mientras ella que me conoce, las envolvía en ese papel que solo se encuentra en las panaderías de antes, le oí comentar que el cadáver estuvo casi cuatro horas delante de su puerta , que perdió clientes y que no se atrevía a salir para no verle, que "¿Como era posible que el Juez o el Forense no llegasen antes?".

Mientras me marchaba con mi trofeo en forma de pan, no pude reprimir mi lengua y le dije en presencia todavía del señor al que solo le faltaban las insignias, lo preocupante no es cuando llega el juez o el forense, si no cuánto tarda en llegar la ambulancia, y que ha hecho la gente por ti hasta que llega.

No me acuerdo de que me lo hice, pero esa noche me cene un gran bocata.

Hace tiempo que no voy a la capital de recados, tengo que pasarme por la panadería, seguro que a estas alturas ya sabe quién era el muerto.

Y el Toro, harto ya, se volvió poeta





Tu, que nunca miras al cielo,
tu, !si tu!, acomodado en una butaca...
 
Porqué no vienes a pastar, con las hijas que no tendré,
para ahorrarles el sufrimiento de su olvidada madre?
Porqué disfrutas viendo manar sangre de mi testuz?
 
Si solo soy un enamorado de la luna...
 
Luna, luna, Luna...
porque te escondes,
porque me ocultas una de tus caras,
me alumbras cuando quieres,
me dejas con estrellas y a veces entre nubes.
 
Luna, avísame cuando te enfrentes al Sol,
para esperarte,
para recordarte, que él, mi rival,
no sería nada sin sus reflejos.
 
Luna cómplice, sé que me esperas,
para jugar al escondite.
 
Luna, luna, mi luna...
caras y sonrisas imposibles,
déjame que alguna vez,
sea yo el que se esconda.
 
Con mi amor...
 
Para que no,
que no me encuentren,
con sus capotes y sus espadas,
con sus picas en Flandes,
con su bayonetas,
con sus banderas,
aquellos que dicen defender mi existencia.
 
(Dedicado a todos aquellos que contemplan en el manar de la sangre de un toro, como un bien cultural, y de paso a los que piensan que existen guerras justas, a los partidarios de la pena de muerte, y a los que creen que el mundo, queda lejos de su casa.)

Sabia conciencia, que juega con culpas y sueños.


Sombra desordenada
En una charla, escuchando a un sabio, mi conciencia encontró un camino para acallarse.

Me dije:                                                                         Si quieres: Prueba con el audio
-Amigo mío callar tu conciencia personal  ya es imposible-
Pero Reflexioné:

-Quizá acallando la otra conciencia, la social,
la que me roba menos sueño…,
me vaya a la cama antes.

Merece la pena la apuesta,
si pierdo tendré un nuevo sueño despierto
si gano dejaré por fin de escribirme,
de dejarme notas por todas partes.

…Y soñaré, solo soñare, sueños libres,
sueños mágicos destinados al olvido.-
-Como el de aquella luciérnaga ciega,
que escribía el libro que encarcela miradas,
en el arroyo de la libélula lectora.-
Ya me he ido por las ramas con mis pensamientos…

Os quería contar que un día escuché a un sabio,
y vi…, personas detrás de mi almohada,
que duermo muy poco para acallar mi conciencia,
ya solo me permito soñar, dormido y despierto,
siempre de forma desordenada,
mis conciencias nunca me dejan tiempo de elección...

Y todas son sabias, todas merecen atención a su charlas.

Os dejo, es tarde y me llama una de las conciencias que más quiero.

Poema incabado, todavía sin voz, desenfocado.

De Internet


Soy solo tu amante, y no lo digo con pena,
siempre voy desde ti a todas partes,
y  alguno de mis yos viene a verte.
 
Soy sorpresa de amor cotidiano,
pluma de almohada, enredada en tu pelo,
sonrisa reposada del día siguiente,
reflejo en tu mirada.
 
Soy vela de noches… de cunas,
mareas de lunas y camas,
de lagrimas propias y ajenas;
soy velas del color de la sangre,
de su alegría y de sus penas.
 
Soy...
un cajón de angustias tempranas,
un libro sin acentos y comas.
tres puntos suspensivos…
 
Soy tanto y tan poco...

Oteando el inifinito


 

Me llamo Ramón, a veces, aunque no me guste.

Imagen de Rafal Olbinski

Me siento a veces, como si impusiese mi amor, obligando, encarcelando a quererme y a compartirme, siento a veces, que no quiero a nadie, que solo busco que me quieran.

Me dejas tiempo y espacio para escribir, me lees a veces, incluso a veces me lees en otros y te emocionas, eres mi sustento, mi guía, eres el mapa de los yos que no conozco, eres todos mis nombres, el rostro que quiero ver en mi último abrazo.

Vosotros, sois miradas, miradas, miradas… sonrisas, abrazos, sois algo de alguno de mis yos, con toda una vida por delante, la recompensa del tiempo que me ha reservado la vida.

Tu mi otro yo, todos mis alter egos, eres inspiración, motivación, mi desorden-ordenado, eres mi memoria de letras, el puente por el que circulan esperanzas de pocos tiempos.

Allá afuera hay más gente, que a veces lee, a veces escribe, a veces entiendo sus voces, pero no encuentro sus tiempos en mis mapas, no puedo llegar a quererlos, por un aplauso.

Me siento a veces como si no creyera, pero es solo un suspiro, una mala respiración, siempre me sorprende en el fondo de alguno de mis cajones, uno de esos cinco nombres a los que obligo a quererme, mis encarcelados no me dejan tiempo para lo que no es importante.

Estoy perdiendo el pudor para contar a quien dedico las letras de mi tiempo, y sin embargo, refugio mi nombre en el más desordenado de mis yos, cuando es evidente para todos mis lectores, que me llamo Ramón, aunque no me guste... a veces.


Proa al siento.


 
 
Cada vida genera tal historia, que nadie jamás sería capaz de contarla.
 
Biógrafos, historiadores, profetas, cuentistas y poetas, llevan intentándolo tanto tiempo, que ya nadie los recuerda.
 
Cada minuto de vida compartido, es tal historia, que nuestra memoria se resiste a arrinconarlo, en algún lugar, cerca del espacio que reservamos al olvido.
 
Un segundo de reflexión cruza algún cielo,
y con firmeza nos sujeta los ojos a nuestra tierra,
una caricia en la nuca, un reflejo,
nos regala milímetros de tiempo,
en sombras de cuatro labios.
 
Y en una hora, solo cuatro besos sin abrazos, el reloj se presenta para que las miradas se pierdan en busca de personajes que vivan momentos.  Las palabras fluyen como mariposas de distancia. Una hora intentando averiguar quiénes somos, como si no lo supiéramos después de tantas historias.
 
Y un día basta, para que el tiempo borre los recuerdos que no queremos dejar en el espacio de unas letras, y no basta una vida para olvidarlos.
 
Pero una noche con una luna de gajo, con un gato invisible colgado, con mares de caras ocultas...
Una noche con velas de goletas siguiendo la guía en su mascaron de proa, de una pescadora de poemas anclados, esa noche, el tiempo dejará de ser contado, los acantilados serán gobernables y en su cubierta se escucharan las sonrisas de los juegos de vidas, que nadie jamás será capaz de contar.
 
Salvo nosotros

Imagen de "El trolley de Nieves"

El verde de tus ojos.


A veces no me doy cuenta, de que no tienes porque ayudarme, en la búsqueda del nombre que perdí hace tiempo y no encuentro, (ni en el más recóndito rincón de mi último cajón), y aun así, me acompañas por debajo de las camas, detrás de las cortinas, o mirando al cielo por la ventana de la cocina.

Quiero pedirte disculpas, en el nombre de la parte de mi yo que te dedico de forma desordenada, (cada vez con menos tiempo), por obligarte a apoyarme, en mis constantes inseguridades, en mis infidelidades.

Hace tiempo que se, que somos algo más que letras, y aun así, te pongo siempre a prueba, esperando tu respuesta, (como aquel cartero loco).

Amor somos los dos, (buscando una voz que nos recite), me dice el viento que me envías, (cabalgando en un rayo desde algún mar de la cara oculta de la luna), con cada una de las siluetas de tus suspiros… sonrisas de la nostalgia de nuestra última mirada, riendas de destino, voces de sueños.

Me tengo que disculpar contigo por olvidarme a veces del pequeño lápiz que llevo colgado del cuello.

No necesitamos nombre, ni tiempo ni espacio, tan solo esperarnos...

Discúlpame por cargar en ti, esperanza, y no ver el verde de tus ojos.

Nada que no sepas

Se lo que soy,
y aun así quiero ser poeta,
desgranar versos,
desangrar conciencias.
Se, que se me pierden las letras en tu tiempo.
Sin ser, nada que no sepas…
Y aun así quiero ser poeta.
Se, que no sé lo que soy…
Sin ti en mi espejo.
Y aun así nuestra voz, quiere ser poema.
 
 

Feliz amor


Irene vino pronto, “La única mujer Papa de la historia”, “Paz en griego”, “Reinas de Navarra”, sabíamos que una niña venía seguro.
A Imanol le costó más salir, no nos gustaba ningún nombre de niño. Pero cada vez me gusta más como suena.
Cuando les pusimos nombre, ya nos habían nacido hace mucho tiempo, yo no sabía cuánto.
 
Pasamos mucho miedo, sabes que el mío era sobre todo perderte. Te veía en Kiz Kulessi, o pescando  aquel aringorri, veía tus ojos de felicidad aquella noche de “May Fair Lady”…
Pensaba que ya nunca podríamos compartir momentos como aquellos, me veía tan solo, aquellos días, en los que no estabas en casa…
Que comprendí todos los miedos, que estabas dispuesta a vencer.
Te costo un poco convencerme, venciste incluso mis miedos.
 
Y empezó nuestro idilio en Valencia. Sus viajes relámpago, tu viaje sola…
La frase de Juana:
“…a los diez minutos, se agarran como una lapa, y ya no se sueltan... es su forma de tener una posibilidad. Isabel se puede bañar en la piscina, incluso saltar de un trampolín si no es muy alto.”
Mientras se pegaba a la pared simulando ser una araña…
Fue muy importante para mi.
Desde ese momento, supe que íbamos a ser padres.
Tu y Yo.
Después vinieron las manchas en las ecografías, nos asustamos un poco, pero todo siguió a delante. Vinieron los almohadones en la cama, la ilusión en el reflejo de tus ojos cada vez que me mirabas, aunque  creyeses que no me daba cuenta.
Artza se puso raro, hasta que descubrimos su propio miedo, despues de gastarnos una pasta en veterinarios. (Te acuerdas?)
 
Y llego el día por fin…
Día largo… muy largo.
Lo que no olvidaré nunca es la paz que sentí dentro de mi, cuando os vi a los tres dormidos, aunque no durase mucho.
Desde entonces, no he tenido tiempo de tener miedo, vosotros no me habéis dejado.
En el día de la Madre, el Padre debería tener siempre un regalo.
Feliz día, de parte de Imanol e Irene, Irene e Imanol…
Y de tu amor.

El Libro del Olvido


El libro del Olvido De esta Época.
Catalogada como nueva era, llena de paradigmas, de desconcierto, incertidumbre, contradicciones y casualidades...

El libro del Olvido Merece que.
La historia lo recuerde como una epopeya religiosa, que marque el comienzo del tiempo de los hombres sin dioses, de todas las mujeres y sus hijos, de todas sus hijas, en cualquier lugar del planeta.

El libro del Olvido Merece marcar.
El tiempo de la diosa tierra recitada en un nuevo lenguaje que entienda todo el mundo que cobija, una evolución de la vida, consciente de su destino, consecuente con su naturaleza, sabia como en su inicio.

El Libro del Olvido Merece ser.
Un gran libro de poemas, leídos y escritos, de ojos abiertos y ojos cerrados.

El Libro del Olvido Merece más.
Que el quijote y la biblia juntos, más que cualquier historia sobre héroes o profetas, titanes o musas, merece mucho más de un millon de versos, mucho más que un puñado de almas muertas.

El Libro del Olvido Merece llegar.
A ser contado de generación en generación,
El tiempo pondrá en su sitio las ilustraciones que lo adornen, la musica que lo acompañe.

El Libro del Olvido y sus poemas recitados
Un gran título...
Llenémoslo de puño y letras,
de prosas de voz finita...
para que perdure en el tiempo,
lo que dura un recuerdo.

Titulo olvidado



 
En el libro del olvido, ese que escribimos un poco tu y un poco yo, mirándonos al espejo, se condensan tantas horas de soledades compartidas, tantas de sonrisas, de reflejos de lunas, se sienten tantos abrazos y besos, tantas lagrimas…
Que se podría resumir en dos silabas o necesitar varias vidas para volver a leerlo.
Solo nos habla, si le escuchamos con los ojos cerrados sin mover los labios, recitándolo en voz alta por dentro, empuñando un lápiz o una pluma al viento.
Es tan eterno, que escapó a todos los principios, no reservó su espacio en el tiempo, se perdió buscando desesperadamente algún recuerdo de cuando pudo ser y no fue, y burló a la muerte.
El libro del olvido, pasa de mano en mano, de vida en vida, de tierra en tierra, es siempre visible desde cualquier mar de la cara oculta de la luna.
El libro del olvido es la memoria que perdemos de cada día que vivimos, cada noche que nos vive, es lo que pudo ser y no fue, es lo que es, si serlo.
Mañana buscare en una brisa, en el sonido del caer de una hoja, en el trazo inseguro de millones de sílabas de esperanzas… en el reflejo de tu mirada… el rincón del cajón en el que he perdido la llave de sus siluetas, y...
Volveré a olvidar...
Dejaré de buscar un espejo, en la cara oculta de la luna, seguiré contemplando la vida, sin saber describirla.
Esperaré la caída de mi última hoja, en este árbol tan concurrido, envidiando siempre al viento.
Tu aliento.

Y aun así, sigo robando tiempo desordenado para escribirme de vez en cuando.

Es evidente la democratización que ha conllevado la extension de las redes sociales a todos los niveles, pero sobre todo en ese enorme espacio que se ha colado en las cocinas de nuestra casa, en nuestros sofas, incluso en los dormitorios más reticentes, en esas redes de peces desconocidos que se llama Internet. Las herramientas, las ofertas irresistibles que pone a nuestra disposición, nos parecen casi ilimitadas, pero... cuando tenemos algo que decir sobre esto o aquello, seguimos igual o peor  que antes, o no nos hace caso nadie o tenemos que sacrificar el motivo de la idea que queríamos contar para que se difunda, antes por lo menos no nos enfadabamos cuando nadie nos hacía caso.
 
Voy a poner un ejemplo muy sencillo,.
Como publicar un libro ganando dinero.
 
La pseudodemocratización de la publicación de contenidos nos ha llevado a pensar que un libro se debe publicar cuando:
 
Se consiguen alrededor de, (no son necesasios más de),  30 o 35 amigos, seguidores o contactos... de relación diaria estable, fiel, (comentario, respuesta, mención, me gusta, etc...), 150 o más, con relación semanal, otros 300 más con relación solo mensual, cuando la organización del número de seguidores, obliga a plazos mayores, bimensual, trimestral, etc.. ya hay que ir pensando en cobrar, puede ser que la gente ya esté dispuesta a pagar por leer el resto.
 
Desde mi punto de vista un libro de 700 páginas exhibidas en la red de tres en tres, debería pensar en cobrar por el resto, en el plazo de unos tres meses, si es de dos en dos paginas se gana algo de tiempo, podríamos llegar a los seis meses, pero hay que aumentar el numero de relaciones personales en todas las redes.
 
El libro se puede preparar previamente, en un retiro alejado de todo, de un mínimo de dos años, el número de páginas deseable ronda las 700, alguna página más, nos daría algo más de tiempo. También se puede ir escribiendo página a página, lo que nos llevaría a aumentar el número total de páginas de la publicación, y el número de relaciones necesarias de forma exponencial.
 
Un consejo:
Cuando leas un libro que acabas de comprar, piensa en como ha llegado a tus manos, algo que alguien ha escrito para que tu lo leas, incluso si el libro es tuyo, y lo más importante, si has pagado por el, o si has ganado tiempo, para segiuir escribiendo.
 
Internet es tiempo, el tiempo es lo único que tenemos, si dejamos que nos lo robe, tenemos que conseguir que nos pague a todos, por alimentar al mayor ladrón de tiempo de la historia.
 
Una huelga total de internet de 24 horas, sería un inicio, o solo un pico en una estadistica, esa es la pregunta, de las voces sin voz que empujan desde la historia.
 
Se me olvidaba, puedes publicar cualquier cosa y ganar pasta, si conoces a alguien en la SGAE, o en sus aledaños.
 
Tienes un manuscrito y lo quieres vender, piensa que hay que tener mucha fé en un escritor como para trabajar para él y pensar en cobrar un sueldo alguna vez, incluso si el autor eres tu mismo.
 
Y aun así....
 
.
 
 
 
 
 
 
 
 

Memorias de un zurdiestro




Hoy, después de tantos años:

¡Estoy de Enhorabuena!

¡He recuperado parte de mi letra!

Y digo bien, solo parte de mi letra,
la de la mano derecha.

Porque mi caligrafía, como se puede comprobar,
en la foto, es irrecuperable.

No la perdí como ahora,
escribiendo letra a letra, dedo a dedo,
fue hace mucho más tiempo, en la década de los sesenta.

Entonces no solo se perseguían las ideologías,
sino cualquier posible desviación,
algunas tan absurdas, como ser zurdo.

Nací zurdo, recuerdo que en las páginas de los puntitos,
aquellas que precedieron a las de las letras,
con mi mano izquierda, conseguía alinearlos,
con la derecha las rectas me salían curvas.

Pero me obligaban a coger el lápiz con la derecha.

Podría decir que la culpa fue de mi Padre,
que me enseño a escribir dejándome elegir mano,
antes de ir al colegio, que era un adelantado,
que intentaba escribir letras con la izquierda,
y me obligaban a poner tan solo puntos con la derecha.

Pero no fue así.

Mi padre era marino, y casi no le conocí.
Podría haber sido mi Madre,
pero no tenía la cultura suficiente,
como para enseñarme a escribir.

La culpa en realidad fue mía, por soportar,
las bofetadas que aun recuerdo,
para que cogiera el lápiz con la mano derecha.

Aun así, fui un privilegiado, tuve dos años de párvulos,
y uno de preparatorio para entrar en el colegio.
Fui a un “Colegio de Primera Infancia”,
se llamaba “El Divino Infante”,
estaba enfrente de Jesuitas.
Recuerdo las botellitas de leche, en una cesta,
que traía el portero, a media mañana,
no me acuerdo de su nombre.

Este templo de los infantes, por su cercanía, casi prometía,
el acceso directo de los niños a los jesuitas,
las niñas, iban a otros colegios.

Y digo que fui un privilegiado,
porque en aquella época, no todo el mundo podía pagar,
para que te cambiasen, de zurdo a diestro,
antes de entrar al colegio.

Desde tercero de básica hasta Cou, lo pase en Jesuitas,
ya como falso diestro.
Lo recuerdo como la época más feliz de mi vida…
Jugaba a futbol, me encantaba,
de pierna era diestro, algo muy raro,
siendo antiguo zurdo de mano.

En jesuitas, con once años, repetí sexto de básica,
a mi amigo le echaron del colegio,
Él no jugaba a futbol.

Me pase casi todos los años castigado o suspendido,
salvo alguna excepción, geografía o historia,
según quien fuese el profesor.

Pasé también muchas horas en la iglesia.
No se como aprobé, como salí del colegio.

Volví a ser un privilegiado, fui a la universidad,
pero no me enteraba de nada,
no podía coger apuntes a esa velocidad.

En aquella época, todavía intentaba conservar mi caligrafía.
El teclado y el ratón hicieron el resto
incluso con la ortografía.

Deje de intentar de escribir,
aquellas maravillosas letras de los cuadernos de caligrafía
me era imposible con la diestra.
Adopte la letra de imprenta,

Y me diréis: ¿Por qué no escribes con la Zurda ahora?

Lo siento, pero ya no puedo, la zurda la tengo tonta,
pudieron más las bofetadas y el futbol,
que la lectura y la escritura,
durante demasiado tiempo…

Pero hoy, os puedo decir, que estoy de Enhorabuena.
Hoy se que soy Ramón, algo más que un zurdo,
que escribe con la diestra.

Gracias a esta ocurrencia, hoy...
He recuperado en este espacio,
parte de mi letra,
he perdido la vergüenza,

de escribir para que alguien lo lea.


Letras pagadas con sueños sin nombre.

 
(La lógica es rehén de la opinión cuando la educación no es suficiente.)
 
Puedo  defender la lógica de quien me pague, de quien compre mis letras, incluso en contra de mi educación, cualquier cosa por seguir opinando.
 
(Por encima de la lógica y la educación, de mi propia opinión… emergen los sueños.)
 
Mi sueño es ganarme la vida entre letras, pero mis personajes me siguen escribiendo, se empeñan en desviarme del deber que me imponen mi lógica y mi educación, no consigo matarlos.
 
(La libertad se sustenta en quien opina basándose en su educación y su lógica.)
 
"A estas alturas…
Quien es Ramón?
Alguien fiel a sus letras?
Es fiel a los personajes que intenta matar?
Es leal en todo lo que escribe?
En lo que recita?
 
A estas alturas de la vida…
Sabe Ramón Quien es?"
 
Casi olvidada mi educación presa del esfuerzo de tener opinión, me exijo todos los días alimentar sueños. Estoy dispuesto si hace falta, a cambiar de nombre, con tal de reflejar en un texto con educación, la lógica de una opinión.
 
"A estas alturas del olvido?
Qué más da un nombre perdido,
en el sueño educado de una opinión ilógica."
 
Que nos liberen ya de la eternidad, que se apiaden de quien escribe su testamento todos los días, su legado, aunque sepa que nadie pagara por leerlo esperando que al menos cuando ya no este, alguien quiera conocer el secreto de su libertad.
 
(Soñar que te recuerden te empuja a coger un lápiz, y escribirles lo que el día no te dejado contarles.)
(Tan solo me queda dejar sin voz  mi nombre, todo lo que escribo está en venta por un recuerdo.)